La salvación de los peces de acuarios: las plantas acuáticas
La planta de acuario todavía se considera demasiado un medio de decorar el acuario, y no se tiene en cuenta, ni se reconoce lo suficiente, la misión verdadera que tiene, mejorar la calidad del agua y mantanerla en perfectas condiciones. Desde hace muchos años se utilizan las plantas en la depuración de aguas residuales por lo que son verdaderas regeneradoras de acuarios. Y el agua de un acuario muchas veces no tiene mejor calidad que las residuales.
También podemos observarlo en el día a día en cualquier lago o río, y es que allí donde no crecen plantas, lo peces también corren un grave peligro de desaparecer.
Por fortuna hoy en día son cada vez más persona las que se responsabilizan de la vida de sus habitantes y cuentan con ello con los conocimientos y técnicas para hacerlo correctamente.
Misión de las plantas acuáticas.
Las plantas sumergidas son potentes suministradoras de oxígeno. Cuando disponen de luz bombean sin cesar oxígeno al agua y a diferencia de todas las medidas artificiales también en el suelo. Son mucho más potentes que las propias piedras difusoras de oxígeno que se emplean de manera artificial. Cuando casi se ha alcanzado el grado de saturación de oxígeno, el desprendimiento de oxígeno se hace visible en forma de burbujas en los sitios en que las plantas se han roto. El oxígeno producido sirve para la respiración de los peces, de los microorganismos, y de las propias plantas y lo que es más importante, ayuda a descomponer las sustancias nocivas. Las bacterias aerobias lo necesitan vitalmente para descomponer las sustancias de desecho, como por ejemplo los excrementos, algas muertas, partículas vegetales, etc. Además oxidan a nitrato (inofensivo para los peces) los compuestos nítricos tóxicos.
Las plantas acuáticas también combaten eficazmente los gérmenes patógenos. En experimentos con diversas plantas acuáticas, quedó demostrado que los gérmenes patógenos son aniquilados con rapidez. Existen plantas que en sus raíces poseen colonias de bacterias simbióticas que matan gérmenes patógenos. Además las plantas acuáticas eliminan sustancias tóxicas.
Las plantas pueden impedir de forma excelente el crecimiento algal. Al competir por los nutrientes, las plantas acuáticas están en ventaja y evitan la extensión de algas.
Y finalmente, las plantas son un componente importante del hábitat de los peces, aportándoles seguridad, refugio y lugar de desove y crianza de los alevines.
